Como último punto del Pleno de hoy, 13 de diciembre de 2022, se ha visto un ruego de Irene Núñez, concejala del Grupo Municipal Popular, en el que planteaba “que el Ayuntamiento de Valladolid (…) adopte las medidas necesarias para que los vecinos que se acercan a las oficinas de atención ciudadana no tengan que permanecer en la calle a merced de las inclemencias del tiempo”. Por supuesto, al comentarlo se han recordado los cambios derivados de la pandemia, cuando hubo que ordenar las entradas mediante cita previa, y lo que ha supuesto después. Pero también se ha informado (y de esto es de lo que se quiere advertir aquí, ahora) de un aspecto del Proyecto de Rehabilitación Energética, Reforma y Actualización de la Casa Consistorial, financiado por los fondos europeos (Next Generation), que da respuesta, en parte, al ruego planteado.

Me refiero a la reordenación de la planta sótano (o baja, depende desde donde se mire), según la cual se dispone que el actual espacio de Registro, con acceso desde Rinconada, se transforme en un ámbito de acogida abierto al público, desplazando así el Registro y la Atención Ciudadana hacia el interior del edificio. De esa forma quedará este primer espacio (en amarillo en la imagen) para mesas altas, registro rápido, autotramitación y expendedor de turnos. Pero también como zona de espera, a cubierto del frío, el calor y la lluvia. En la casa de todas y todos. Quizá un aspecto menor. Pero no para quienes, por lo que sea, aguardan fuera de la puerta.

(Imagen: foto del plano a que se refiere el post. A la izquierda, la plaza de la Rinconada).